Sara, la niñita Maestra

[GEMMA]

Padres y Madres…..
Que tal vuestros niños ?,
que han hecho esas vacaciones ?,
han sufrido mucho los calores y que habéis hecho para remediarlo ?,
como veis la vuelta al cole ?,
se han hartado de helados ?,
y vosotros padres, muchos cafés con hielo ?.
Porque no explicáis vuestras aventuras con ellos.

Yo pase unos días con un grupo de niños/as, desde pequeñines a gatas a grandotes 15 años, sus travesuras son una delicia, te hacen reír y cabrear, pero esto ultimo se les perdona, cuando ves su inocencia, cuando ves que no hay malicia; los grandotes son mas pícaros, y con ellos hay que darles tartas y tortas.

Me lo pase divinamente bien, pero en general vi una gran despreocupación de los mayores hacia sus propios hijos. ( por qué nos olvidamos de los mas pequeñines de la casa ? ).
Por las noches, cuando nos recogíamos con algunos padres intentaba crear algunas peripatéticas, sacaba temas pero me quedaba con la palabra en la boca.
Las noches se convertían en el típico ron quemado en que padres y mayores disfrutaban entre risas y chistes tontos. A mí también me encanta reír y mojarme los labios por no decir que no participe en el brindis, pero todo giraba en la liga de fútbol, politiqueos, y paranoias colectivas.
Una madre comentaba, “ toda nuestra familia se vacunara cuando salga la vacuna contra el monstruo H1N1 “ ( la bastardilla es mía ).
Yo dije: yo no pienso vacunarme al igual que mis dos hijos.
Creéis que alguien escucho y se intereso en el tema ?,
nadie fue capaz de preguntar,
puedes explicar el por qué ?. Esa seria la actitud correcta, simplemente un padre culto, educado, con cursos superiores de ingeniería solto: tu estas loca. Esa fue toda la respuesta que dio.

Suerte tuve de los niños,
las risa de los niños esconden sabiduría,
esconden inocencia,
sus risas no solo se oyen,
se ven en sus rostros, sus ojos, sus manos,
su cuerpo entero es pura vibración de encanto,
hasta se huele su fragancia y aroma que te embriaga.

“ Un gran quitapenas es y no el alcohol “, como le dije a un padre todo resacoso cuando me lo encontré por la mañana tomando su café y buscando si aun había sobrado algo de ron. Ni se entero lo que le dije, válgame la virgen, además de sordo tonto el pobre hombre. Era el ingeniero.

Mi mayor recuerdo me lo llevo de una niña de 5 años, solitaria, inteligente, despierta, risueña, curiosa, siempre iba con su muñeca, se pasaba todo el día recogiendo flores, plantas para curar a su muñeca.
Qué le pasa a tu muñeca ?.
Le duele la tripita.
Y eso !, como es que le duele la tripita.
Porque comió mucho chocolate.

Su madre, una buena mujer, 30 y pocos, recién separada, llorosa por la perdida, fue la única que al ver que su hija Sara y yo hacíamos piña, todo el día juntas, se me acerco y me contó su historia entre lagrimas.
Sara, le dije, tu mami esta pocha, ya sabes la tripita.
En un momento le trajo flores y hierbas silvestres del bosque.
La madre sonrío.
Le dije a la madre, porque no escuchas mas tu hija.
Se puso a reír.
No, no, no te rías, piensa en lo que te ha dado, y por qué. ( Rápido vi la situación por la expresión de Sara en sus ojos ), sabes, no deberías de comer tanto chocolate.
Como lo sabes me dijo la madre.
Seguro que lo tomas de un año para aquí desde que tu marido te dejo.
Sí, sí, una amiga me dijo que es un gran antidepresivo.
Su hija la miraba con una linda sonrisa mientras le acariciaba la barrigita, le ponía flores y le daba besitos,
Eso si que es un gran antidpresivo, le dije.

Ahora somos amigas.

Y colorin colorado, ese cuento se acabo

Gemma

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