Dolor de pie: juanete

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  • Este debate tiene 0 respuestas, 1 mensaje y ha sido actualizado por última vez el hace 11 años, 8 meses por Anónimo.
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    Anónimo
    Invitado

    Una vez más he podido comprobar la eficacia del Método Jinjer a través del termomasaje.
    Lo apliqué ayer a una amiga que llevaba días padeciendo un intenso dolor en el pie derecho, producido por un juanete: llevaba varias semanas con molestias en el pie, que fue aumentando hasta llegar a un punto de dolor intenso en todo el pie y especialmente en la zona del metatarso-falange. El dolor se le irradiaba a toda la pierna llegándole incluso hasta el cuello. Lógicamente, tenía dificultad para caminar, y cierto grado de irritabilidad general.

    Al pensar en el tratamiento que requería, vi claro que primero era conveniente atenderla desde un plano general, para rebajar así la alteración de su sistema nervioso. Después pasé a actuación zonal y local.

    Tratamiento general:
    -Envoltura completa fría: sobre la camilla de masaje se coloca un plástico grande, encima una o varias mantas, sobre estas una sábana seca y por último otra sabana humedecida y escurrida en agua fría. Le envuelvo todo el cuerpo desnudo, desde los pies hasta el cuello con la sábana mojada bien pegada al cuerpo, evitando hacer pliegues. Seguidamente tapo con la sábana seca y las mantas. Tapo bien el cuello para evitar que le entre aire. La mantengo tapada durante una hora, hasta que se le produjo una fuerte reacción térmica de calor y abundante sudoración. Retiro la envoltura manteniéndola abrigada y con un paño tibio limpio los restos de sudor.

    Importante: este tipo de envolturas requiere de dominio profesional en termorregulación, ya que hay que estar muy atentos a las reacciones que se van produciendo en la persona a la que se le aplica.

    Con toda ella relajada y liviana pasamos al termomasaje zonal, de rodilla hacia el tobillo y de ahí al pie, llegando por último al punto de máximo dolor concentrado en la planta del pie.
    Gradualmente se iba liberando la tensión acumulada y me permitía profundizar un poco más el masaje, hasta movilizar con cuidado el tobillo y el pie.
    Para el masaje usé las cremas Balsámica y Aliento polar alternando con el pulverizador (agua con Aliento Polar)

    Resultado: excelente! A nivel local apenas sentía una leve molestia en el punto de máximo dolor y caminaba perfectamente. A nivel general se sentía ligera como una pluma. Decía apreciar como le circulaba la energía, como si antes la tuviera taponada. Y así era.

    Esta es una de las maneras de tratar este tipo de alteraciones, también podríamos reducirlo a nivel local con buen resultado. Pero mi criterio inicial en este caso me pedía hacerlo mas completo.

    Abrazos termorreguladores!
    Africa.

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