Si ya no sois lactantes, ¿porqué tomáis leche?
La leche es el alimento más adecuado e imprescindible para los lactantes de cualquier especie de mamíferos.
Pero… las industrias lácteas han hecho una transpolación. Si la leche es buena para los lactantes, lo será también para todos. ¡Craso error! Cosas de la percepción lineal del mundo que se ven como absurdas desde la percepción cíclica y evolutiva.
– La leche y lácteos son alimento enlazantes. Generadores de mucosidades, contaminación del medio ambiente interno que posibilita entre otras cosas la facilidad para contraer gripes y tumores.
– Los lácteos son materia prima para le generación de tumores de mama y útero. Hace años un informe de las universidades de Yale y de Harward concluía: “hay una alta probabilidad de que los lácteos colaboren a la formación de tumores de mama y útero”. El informe se archivó y… todo sigue igual!
– La leche tiene prioridad de digestión. Por eso el refrán de “después de la leche, nada eches”, porque tendrá que esperar, con riesgo de putrefacciones, hasta que se digiera la leche.
– A partir de los 7 años no tenemos la lactasa, instrumento para digerir la leche. Todos los médicos del mundo lo saben porque forma parte del ABC de la fisiología más elemental (podeis preguntárselo a cualquiera de ellos) ¿Por qué siguen recomendando leche? Todos lo sabemos!
– La leche genera infantilismo y colabora a la extinción de la consciencia. Es un alimento para lactantes e infantes. Si la tomamos cuando ya no somos infantes, colaborará al infantilismo de nuestra percepción del mundo.
– La leche genera palurdismo. Toda la leche que se puede adquirir hoy en los supermercados es de vaca palurda, versus vaca brava. En tono de broma, solemos decir que podéis tomar toda la leche de vaca del mundo. ¡Pero que sea de vaca brava… y ordeñada por vosotros mismos! Las vacas de granja de hoy son lo más solemnemente palurdo que ha parido madre!
– La leche de vaca la diseñó la Naturaleza para criar hermosos terneros. Pero no para criar seres inteligentes y conscientes. Así que si queréis que vuestros hijos sean grandes, pero tan solemnemente tontos y palurdos como una vaca, podéis seguir dándoles leche.
– La leche es fabricante de esclavos. Las vacas de granja son, probablemente, uno de los animales domésticos más explotados como esclavos. ¡Y de lo que se come, se cría!
Ya no pueden hacer ni la guerra (les han suprimido los cuernos), ni el amor (inseminación artificial).
– Muchas de las artrosis de espalda están ocasionadas por un exceso de lacteos. La leche perjudica a la parte alta de la espalda. Cuanto más densidad, más abajo afecta, hasta los quesos muy curados que afectan a la parte baja de la espalda.
– El calcio de la leche de vaca es difícilmente asimilable. Y es el argumento de todas las industrias lácteas, ¡necesitas calcio!. Las algas tienen entre 10 y 20 veces más calcio que la leche y, además, es perfectamente asimilable.
Como argumento supremo. Miraros al espejo, sonreíd; ¿tenéis dientes? Entonces ya no sois lactantes. La leche es para los lactantes. ¡Y tan sólo la de la propia madre! ¡No la de “mamá vaca palurda”!
Observación: al igual que el vino ya no es uva, porque ha fermentado, el yogur ya no es leche por el mismo motivo. Tomar un yogur al día es adecuado. Si abusáis de los yogures, perjudicareis a vuestros pulmones y a vuestra piel, el tercer pulmón y os saldrán manchas blancas y luego echareis la culpa al Sol