Buenos días,
Quería compartir con vosotros mi testimonio. Desde hace meses tengo problemas hormonales muy grandes y se manifiestan a través de granos quísticos en zona del cuello y alrededor de la boca y la barbilla. Además, estos desajustes producen cambios anímicos muy fuertes (y no siempre eufóricos) con situaciones de ansiedad, angustia y estrés, lo que muchas veces me derivaba en insomnio, irritabilidad, etc, como le pasaba a Javier. He ido cuidando poco a poco mi alimentación (con algún pequeño capricho) y también dándome las duchas frías por las noches (de las de la mañana ni quería hablar, ni pensar).
El otro día, a la vuelta de vacaciones, le pedí cita a África para hacerme un facial e ir cuidando un poquito más mi cara. Ella me estuvo comentando lo de la termorregulación (como en veces anteriores) y yo convencida pero sabiendo que al salir de allí no iba a hacer nada de nada.
Total que, aunque ya sé que es un pequeño paso para cualquiera, para mí ha supuesto una gran zancada: hoy me he dado mi primera ducha fría al despertarme y me he sentido tan orgullosa que he necesitado escribirlo y así poder gritarlo a los cuatro vientos. No puedo hablar de resultados todavía porque es muy pronto y porque, aunque quiero seguir, me da miedo el invierno y sus noches y mañanas frías. La voluntad está y espero seguirla, lo único que quiero decir es que me he sentido muy orgullosa de mí y que me he sentido “un poquito” mejor. Espero que esto sea un largo camino hacia el bienestar y la felicidad.
Y agradecer especialmente a África por haberme impulsado y animado.
Os mando un abrazo desde mi primer día de (quizás) una nueva (espero) vida.