Home › Foros › Bienestar › Estreñimiento › Los “parientes” aceptan su destino
Desde la percepción “ordinaria” de Jinjer, el ratón, es ratón y ejerce de ratón. Pero no entendemos que “va por delante de los demás”. Por ejemplo, ¿delante del leopardo, de la ardilla, del huracán?
El oso, es oso y, sencillamente, ejerce de oso. Pasa totalmente del ratón y de sus usos y costumbres. Y, como maestro, nos da lecciones de “maestro oso” que no tienen nada que ver con las lecciones del “maestro ratón”.
El búfalo es y vive como un búfalo y, si acepta su destino, como lo hace en automático, jamás desearía convertirse en águila, como el águila no desearía convertirse en búfalo.
Y el águila, pasa totalmente de animar a nadie a mirar a lo alto. Sencillamente vive como águila.
Los parientes aceptan su destino como lo más natural del mundo y lo viven con piloto automático.
En la percepción de Jinjer no entendemos que algo que es natural como un búfalo, tenga deseos de convertirse en algo que no es él, como un águila. Desde nuestro punto de vista, no está en el Orden ni corresponde a la naturaleza del búfalo.
Al igual que los humanos inventamos a los dioses, tratamos muchas veces de atribuir (proyectando nuestra “invasora” percepción) vivencias, anhelos y sentimientos a los parientes-maestros que, para nada, están en su naturaleza.
En la percepción de Jinjer, aceptamos y practicamos a veces la percepción poética, pero no la confundimos con la ordinaria. Y sentimos que nunca la percepción poética entraría en contradicción con la percepción ordinaria.
Porque en ese caso, nos haríamos un lío con las lecciones que nos da el búfalo, porque confundiiríamos su esencia y actuar impecable como búfalo con una pretendida proyección humana de que lo que quiere es convertirse en águila.